QUIMILÍ, Moreno (C) Desde hace un par de semanas todo ha cambiado en el paraje Puna, a unos 20 kilómetros de la ciudad cabecera del departamento Moreno. No sólo se alteró la calma de los pobladores, sino también parte del paisaje circundante sufrió una llamativa transformación a partir de un extraño fenómeno que se repite todos los días, cuando enormes nubes de polvo se levantan en un radio de 700 metros, para descolgarse luego sobre la superficie cubriendo la vegetación, los alambrados y todo en el lugar.
A tal punto llega la intriga, que desde la Agencia de Desarrollo se impulsará, una investigación en la zona, con ayuda de profesionales del Inta de Quimilí.
Según el jefe de agencia, Ángel Ponti, ‘es la primera vez que ocurre un fenómeno de estas características en la zona’.
Mientras tanto, en el paraje Puna los pobladores intentan darle una explicación lógica a la extraña situación que les toca vivir, es que durante el día por más de seis horas y hasta la noche, se levanta inexplicablemente la tierra.
Lo asombroso del caso es que siempre se da en un mismo sector. Los vecinos sostienen que ‘es como si le tierra estuviera siendo atraída por una fuerza’.
Esto hizo que quedara el pastizal en todo el campo con una capa de más de siete centímetros y en el monte y los alambrados llegaron a hacerse montículos de 80 centímetros de polvillo.
‘Cuando se comienza a levantar esa arena nosotros disparamos adentro de la casa, y cuando se pone más feo, con la familia nos vamos a Quimilí o Vilelas, porque yo sufro de los pulmones y no se soporta, no nos deja respirar; yo tengo 59 años y nunca vivimos una situación como esta’, dijo a EL LIBERAL don Juan Belizán, quien vive junto a su familia en el paraje desde que nació.
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