DESPUÉS DE 3 AÑOS JAPÓN CONFIESA LA VERDAD.
Hasta 300 toneladas de agua contaminada procedentes de la central nuclear de Fukushima, dañada por el terremoto y tsunami de 2011 que provocó fusiones de núcleos, se vierten cada día al mar, según reconoció hoy el gobierno japonés.
La contaminación mas grave está limitada sin embargo a la zona cercana a la central nuclear, informó la agencia de noticias Kyodo, señaló DPA.
Con un muro de contención subterráneo hecho de tierra congelada se intentará ahora que el agua subterránea siga entrando en la instalación. Para ello se colocarán tubos con refrigerantes químicos en torno a los edificios de los reactores 1 y 4, que crearán una barrera protectora de 1,4 kilómetros.
Ya que el gestor de la central Tepco no tiene los medios financieros necesarios para la barrera protectora, el gobierno intervendrá, dijo un portavoz en Tokio, que añadió que la construcción de un muro de contención a partir de tierra congelada de tales dimensiones no tiene precedentes en el mundo.
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