DEL CIELO A LA TIERRA
UN HERMANO DE LOS ANTIGUOS DÍAS ME HA ESCRITO.
CON HONOR Y MUCHO AGRADO PUBLICO.
EN FE
Giorgio Bongiovanni
3 de Febrero de 2018
EL MESÍAS Y SU PUEBLO (1)
TU, JESÚS, RECORRISTE SAMARIA HASTA LLEGAR AL POZO DE JACOB, DONDE UNA MUJER TE RECONOCIÓ COMO EL MESÍAS Y REY DE LA GENTE:
“DAME DE BEBER – LE DIJISTE – PARA QUE EL AGUA DE LA GRACIA LIMPIE LOS PECADOS DE AQUELLOS QUE NO ACOGEN MI PALABRA EN SU CORAZÓN”.
TU, JESÚS, LLEGASTE A LA PISCINA DE BETSAIDA, DONDE TE ARRODILLASTE PARA SANAR A UN POBRE DE ESPÍRITU QUE ESPERABA AL MESÍAS:
“LEVÁNTATE Y CAMINA – LE DIJISTE – TU FE TE HA SALVADO Y VE A DAR LA BUENA NUEVA A LA GENTE”.
Y TODOS LOS PRESENTES, ESTUPEFACTOS, TE CANTARON ALABANZAS.
TU, JESÚS, LLEGASTE EN DÍA SÁBADO AL TEMPLO DEL REY SALOMÓN, FRENTE A LOS FARISEOS DE CORAZÓN ENDURECIDO, Y DIVISASTE A UN OBSESIVO QUE SE AGITABA EN BUSCA DE PAZ:
“CALLA, ESPÍRITU IMPURO, Y SAL DE ESTE HOMBRE EN EL NOMBRE DE DIOS QUE TE HA CREADO” - Y SOPLASTE TU ESPÍRITU SOBRE ÉL.
INMEDIATAMENTE EL ESPÍRITU IMPURO, APLASTADO POR TU ORDEN, HUYÓ DE ESE HOMBRE QUE COMENZÓ A CONOCER LA BELLEZA DE LA LIBERTAD DE LOS HIJOS DE DIOS Y ENTRÓ CONTIGO AL TEMPLO EN MEDIO DE LOS DOCTORES DE LA LEY PARA OFRECER UN HOLOCAUSTO DE ALABANZAS A YAHVEH.
EN POS DE SU LIBERACIÓN Y DE SU SAGRADO TEMOR.
Fabio Maccari
3/2/18
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